El aspecto social de la Reforma Interior de Barcelona (1917)
Peces històriques triades per Josep Maria Casasús
De l’article de Josep Maria Castellet i Pont (Sabadell, 1879 - Barcelona, 1929) a la revista mensual La Construcción (V-1917). Castellet i Pont, periodista, poeta i escriptor, va dirigir Diari de Sabadell. La Gran Via A, aquí esmentada, era una de les tres grans vies projectades pel Pla Baixeras: la prolongació del carrer Pau Claris amb la formació de la Via Laietana.
Es indudable que la reforma social de una gran ciudad no tiene por único objeto el abrir anchas y hermosas avenidas para que los edificios, más o menos monumentales en ellas emplazados, sean orgullo de los habitantes y constante admiración de los extraños. Tal vez esto solo no basta para justificar la demolición de vetustas fincas, en las cuales siempre hay algo respetable que responde al arte de su época y que, por lo mismo, tiene un valor inapreciable. Con la reforma de una ciudad -y esto acontece en Barcelona- un nuevo arte viene a suplantar al de otros tiempos y con los cascotes del derribo caen y desaparecen recuerdos y tradiciones, horas trágicas y gloriosas, todo un pasado que se derrumba, llevándose consigo pedazos del alma ciudadana. […] Pero el deber de las grandes urbes es el de modernizarse, siguiendo la corriente del progreso que avanza, sin desfallecer, camino de la perfección. […] Barcelona supo darse cuenta de sus necesidades y quiso desprenderse de algo que, siendo muy digno y venerable, la afeaba estética y socialmente. Ideóse la apertura de tres grandes avenidas para con ellas resolver en la parte antigua de la ciudad importantes problemas que, como el de la vistosidad y el de la higiene, son esencialísimos. La obra de la Reforma interior de Barcelona es una verdadera obra social digna de todo elogio, pues basta recordar algunas de las calles desaparecidas o ver las que están próximas a desaparecer para hacerse cargo que de esta desaparición han de obtener, y han obtenido ya, sendas ventajas las clases humildes de la capital, aunque de momento les implique algún sacrificio, tal como el de trasladar su domicilio, por regla general con cierto gravamen en el importe del alquiler. Pero en el cambio han ganado en higiene, que al fin es salud para sí y para sus descendientes. La Gran Vía A, que es la única hasta ahora de la cual podemos hablar, comprende tres secciones y afecta a 293 fincas, distribuidas en 118 para la primera sección, 132 para la segunda y 43 para la tercera. […] Forman las tres secciones un total de 2.199 viviendas, o sea que implican el traslado forzoso a otros barrios de la ciudad de otras tantas familias. […] Los millones que Barcelona invierte en su Reforma interior no son caprichosamente lanzados a la aventura de una empresa, sino invertidos en algo positivo. Evitar los focos de infección vale mucho más que tener un lazareto en buenas condiciones, puesto que su utilización no es menester. Derribar ciertas fincas, eliminar ciertas calles, no es solo evitar focos de infección, sino evitar la mayor infección de todas: la que corrompe el espíritu.