ABANS D’ARA

Unidad de lengua. La península escandinava

D’Unamuno (Bilbao, 1864-Salamanca, 1936) a La Publicidad (31-I-1919). En cent anys no s’han dissipat les paradoxes respecte a règims polítics i emancipacions nacionals, i la funció que hi tenen les llengües.

Miguel De Unamuno 1919
26/11/2014

Peces Històriques Triades Per Josep Maria Casasús[...] Una Monarquía, aunque sea federal, no une nada; una República revolucionaria, por lógica crítica unitaria, es la que une. Y conviene no confundir federalismo con republicanismo o liberalismo. Se puede ser muy federalista y nada republicano, nada demócrata y nada liberal, y se puede ser muy liberal, muy demócrata y muy republicano y antifederalista. Las Repúblicas federales no son, por serlo, más liberales ni democráticas que las unitarias, como las Monarquías unitarias no son, por serlo, más despóticas que las federales. Suecia y Noruega estaban federadas, levísima y flojamente federadas, y acabaron por separarse del todo y por no tener apenas más relaciones entre sí que las que guardan dos naciones cualesquiera cultas y vecinas, que tienen frontera común. Se separaron en paz, aunque no en perfecta amistad, sin un tiro, sin un motín, sin una estridencia, dando un admirable ejemplo de civilidad. ¿Por qué se separaron? En el fondo porque había dos lenguas distintas, aunque muy semejantes entre sí, tan semejantes como entre sí parecen serlo las que se hablan en nuestra Península ibérica, excluyendo el vascuence. Comprendieron que no cabe ni federación, ni confederación duraderas y sólidas donde no hay una sola lengua de enseñanza general obligatoria. Federaciones o confederación con pluralidad de lenguas pedagógicas y oficiales sólo caben en Monarquía. […] Suecia y Noruega se separaron en paz y en gracia de historia, aunque no de buena gana, por lo menos de parte de Suecia. ¿Se federarán? Antes lo hará Noruega con Dinamarca, y es porque en ambas naciones -a pesar de ciertas pedantescas pretensiones de ciertos noruegos, que hasta buscan pueriles diferenciaciones ortográficas- se habla la misma lengua. La lengua de Ibsen y de Bjoerson es sustancialmente la misma que la de Kierkegaard o Drachmann o Hamsun. […] ¿Es que los escandinavos son pueblos que no atienden a razones, que ni oyen su interés, que se dejan arrastrar de sentimentalismos y pasiones? No; es la historia, es la realidad, es el hecho. […]